REIKI es una palabra de origen japonés en la que REI significa Energía Universal y KI significa Energía Vital. Este término se refiere al proceso por el cual absorbemos, a través de nuestros centros energéticos o chakras, esta Energía Universal que nutre y constituye el universo y cada ser que en él habita, a la vez que la transformamos en Energía Vital propia.

Método de sanación que permite canalizar esta energía hacia uno mismo, o hacia otras personas o seres vivos, a través de la imposición de manos. Armoniza todos los aspectos de nuestro Ser: físico, mental, emocional y espiritual; y desbloquea las zonas del cuerpo donde la energía propia puede estar obstruida, devolviéndonos el bienestar y la salud en todos los aspectos. Además de un eficaz método terapéutico, Reiki es una maravillosa herramienta de desarrollo personal y de evolución que nos ayuda a encontrar la paz interior.

Procedimiento.

En un ambiente armónico, la persona que va a recibir el tratamiento se coloca tumbada en la camilla, descalza y con ropa cómoda, donde primeramente realizará unas respiraciones profundas para relajarse, mientras que la maestra de Reiki comenzará alisando su aura y dibujando los símbolos Reiki, para continuar con la imposición de manos en diferentes partes del cuerpo de la persona.

Las manos canalizan la energía que fluirá por su organismo. La energía fluye allí donde es necesaria para armonizar el desequilibrio. No sólo soluciona el problema, sino que se dirige a la causa que la origina. A menudo se trata de emociones bloqueadas que impiden el flujo natural de la energía a través del organismo. A medida que la persona recibe Reiki, se va relajando de manera que estos bloqueos son disueltos y el cuerpo y la mente poco a poco van recuperando su equilibrio. 

Beneficios.

La persona puede beneficiarse de los efectos de Reiki desde la primera sesión, aunque es recomendable tomar entre ocho y diez sesiones para desarrollar un proceso de Sanación completo. Pueden recibir Reiki todas las personas, independientemente de su edad o condición de salud. Los beneficios de recibir un tratamiento con Reiki son múltiples, algunos de los más destacados son:

• Fortalece el sistema inmunológico.
• Nos nutre de energía vital con eficacia inmediata.
• Ayuda a eliminar toxinas a nivel orgánico y a depurar nuestra mente de emociones limitantes.
• Permite reducir el nivel de estrés.
• Favorece la intuición, la creatividad y el desarrollo de nuestra sensibilidad.
• Reactiva, desbloqueando los meridianos, los centros energéticos y depurando nuestra aura.
• Potencia el efecto de muchos tratamientos médicos. 

En el año 1995 la OMS (Organización Mundial para la Salud) reconoce Reiki como:

Una terapia complementaria válida para mejorar los estados de todo tipo de enfermedades.

Actualmente Reiki se utiliza en muchos hospitales del mundo como apoyo al tratamiento médico. 

Orígenes.

De diferentes maneras, REIKI ha sido practicado desde hace miles de años en diferentes culturas, principalmente en Tibet y la India. Sin embargo, fue el monje japonés Mikao Usui, quien, a mediados del siglo XX, sistematizó la práctica de este método de Sanación, dando lugar a lo que hoy conocemos como Reiki Usui.