Otras vidas pasadas
Indagar en las vidas pasadas, en mi opinión, debería contribuir a sanar o a comprender mejor alguna información valiosa contenida en las mismas para nuestra vida actual de encarnación, nunca debería de ser una excusa para colmar nuestra curiosidad, ya que estaremos incidiendo en nuestras
memorias kármicas sin otro interés que el de el entretenimiento, así podemos activar memorias que, al carecer de un propósito auténtico no sabremos que hacer con ellas ignorando la repercusión que esto puede acarrear a nuestra alma o a nuestra vida cotidiana.
Esto puede acarrear a nuestra alma o a nuestra vida cotidiana.
Hablar de vidas pasadas no es del todo correcto, se trata de vidas concomitantes es decir, estas en realidad son emanaciones de nuestra energía ocurriendo simultáneamente en diferentes niveles de conciencia o niveles vibratorios, tampoco son paralelas pues, interfieren e integran parte de su información entre sí además de incurrir en la encarnación presente en este plano dimensional y en este planeta Tierra.
Suponen un aprendizaje para evitar el apego y para realizar una mejor labor de servicio al Ser Divino que vinimos a expresar en la encarnación, constituyen una oportunidad para tratar aquellos aspectos, acciones o experiencias de vida que condicionan y obstaculizan el desarrollo de nuestras almas así como la manifestación del libre albedrío de cada ser humano a través de la diversidad de su personalidad ego, sanar las memorias de vidas pasadas nos sirve de entrenamiento para superar,
según Leonard Orr, el creador del Rebirthing, la muerte del cuerpo y desarrollar la Inmortalidad Física, para lograr el autoperdón por los errores cometidos, además para hacer una correcta elaboración del ciclo nacimiento-muerte.
La sanación de nuestras vidas concomitantes con frecuencia aparece durante las sesiones de Rebirthing- Renacimiento, lo cual permite una correcta integración de las mismas y favorece el equilibrio psicoemocional.
Mientras continuamos con el ciclo de sesiones de respiración pueden
darse varias veces las mismas vidas completando la información proporcionada hasta el momento o puede que con una sola vez, una sola sesión de respiración , sea suficiente y, en las siguientes sesiones aparezcan nuevas vidas pasadas diferentes o incluso que no vuelva a ocurrir, si la persona ya no precisa reparar o sanar a través de esas memorias.
Dichas memorias se nos pueden presentar como imágenes mentales mientras respiramos, mediante registros o sensaciones corporales, emociones etc, al liberarse por el efecto de la inhalación de prana inciden a la vez en esa dimensión en la que se producen como en el presente ocasionando de este modo la sanación de esas heridas.
Aquel material que haya permanecido sin sanar o incluso olvidado por nosotros/as permanece silenciado en nuestro inconsciente y va a ser removido y traído a la luz por el efecto de la respiración, pues la energía de vida, el prana, el ki, el chi, el aliento divino, penetran en nuestro
interior durante el cotidiano y sencillo acto de la respirar. Cuanto más nos entregamos a la respiración más imbuidos/as de esta energía vital nos encontraremos por tanto más fácil nos va resultar soltar la información retenida hasta ese momento, en ocasiones llega cristalizar ennuestras células corporales.
Abrirnos a la vida es aceptar la maestría implícita en la respiración, confiar en la vida misma, liberar nuestra mente, cuerpo, emociones y espíritu de cuanto pueda privarle de expresar su verdad, simplicidad, el amor incondicional en definitiva.